martes, 11 de noviembre de 2008

EVENTOS FINALES




Los acontecimientos finales de la historia Apocalipsis 14:6-12 y Apocalisis 18:1-4

Desde 1844:
Se ha considerado desde este año la apertura para las grandes verdades entre el pueblo de Dios, como ser, la verdad del sábado, el sellamiento, el Zarandeo, el Juicio investigador, en general la doctrina del Santuario. Miremos como cada una de estas cosas se complementan y llegan hasta el final de la historia de este mundo.

El sello
El sello de Dios es el Sábado, y fue utilizado por Dios para él identificarse con su pueblo y para que fuese una señal de identificación de sus pueblo con los demas pueblos. La mera observancia del sabado no es lo que significa recibir el sello del Dios vivo pero si es la señal identificadota. Leamos Ezequiel 20:12,20.

Dios ha dado a los hombres el sábado como una señal entre él y ellos, como una prueba de su lealtad. Aquellos que, después de recibir la luz concerniente a la ley de Dios continúen desobedeciendo y exaltando las leyes humanas por encima de la ley de Dios, en la gran crisis que está delante de nosotros, recibirán la marca de la bestia (Carta 98, 1900). Evangelismo p.176

“El Señor manda por el mismo profeta: "Ata el rollo del testimonio, y sella la ley entre mis discípulos." (Isaías 8: 16, V.M.) El sello de la ley de Dios se encuentra en el cuarto mandamiento. Este es el único de los diez mandamientos que contiene tanto el nombre como el título del Legislador. Declara que es el Creador del cielo y de la tierra, y revela así el derecho que tiene para ser reverenciado y adorado sobre todos los demás. Aparte de este precepto, no hay nada en el Decálogo que muestre qué autoridad fue la que promulgó la ley. Cuando el día de reposo fue cambiado por el poder del Papa, se le quitó el sello a la ley. Los discípulos de Jesús están llamados a restablecerlo elevando el sábado del cuarto mandamiento a su lugar legítimo como institución conmemorativa del Creador y signo de su autoridad.” CS pag. 505

“Cuando comenzamos a presentar la luz sobre la prueba del Sábado, no teníamos una idea clara y definida del mensaje del tercer ángel de Apocalipsis 14:9-12. La carga de nuestro testimonio como lo presentábamos ante el pueblo era que el gran movimiento del segundo advenimiento era de Dios, que los mensajes primero y segundo fueron adelante, y que el tercero era para ser dado. Vimos que el tercer mensaje finalizaba con las palabras: ‘Aquí está la paciencia de los santos: aquí están aquellos que guardan los mandamientos de Dios, y la fe de Jesús’. Y así como vimos claramente vemos ahora que esas palabras proféticas sugieren una reforma del sábado”. 1T 78,79.

“Después que Jesús abrió la puerta del lugar santísimo, vióse la luz del sábado, y el pueblo de Dios fue probado, como antiguamente lo fueron los hijos de Israel, para ver si quería guardar la ley de Dios”.
PE 254.

“Lo que caracterizará de un modo peculiar a los adoradores de Dios será su respeto por el cuarto mandamiento, puesto que es la señal del poder creador de Dios y atestigua que él tiene derecho a la veneración y al homenaje de los hombres. Los impíos se dis-tinguirán por sus esfuerzos para derribar el monumento conmemorativo del Creador y exaltar en su lugar la institución romana. En este conflicto, la cristiandad entera se encontrará dividida en dos grandes clases: la que guardará los mandamientos de Dios y la fe de Jesús y la que adorará la bestia y su imagen y recibirá su marca”. 3JT 285.

“El sábado es el tema que probará a todos. Es la línea de demarcación entre los leales y fieles y los desleales y transgresores. Este es el sábado que Dios ordenó, y los que aseveran ser observadores de los mandamientos, los que creen que ellos están ahora bajo la proclamación del mensaje del tercer ángel, verán la parte importante que el sábado del cuarto mandamiento tiene en ese mensaje. Es el sello del Dios vivo”. 3MS 484.
“Se me mostró también que el tercer ángel, que proclama los mandamientos de Dios y la fe de Jesús, representa a quienes reciben este mensaje y alzan la voz a fin de amonestar al mundo para que guarde los mandamientos de la ley de Dios como la niña de sus ojos, y que, en respuesta a esta amonestación, muchos abrazarían el sábado del Señor”. NB 104, 105.
“El mensaje del tercer ángel exige la presentación del sábado del cuarto mandamiento, y esta verdad debe presentarse al mundo”. Ev 138.
“Desde 1844, en cumplimiento de la profecía del mensaje del tercer ángel, la atención del mundo ha sido llamada al verdadero sábado, y un número que constantemente aumenta está retornando a la observancia del día santo de Dios”. 4SG 286.
“La proclamación del mensaje del tercer ángel exige la presentación de la verdad del sábado”. OE 164.

“Había de ser dado el mensaje del tercer ángel, las mentes de los creyentes habían de ser dirigidas al santuario celestial, donde Cristo ha entrado para hacer expiación por su pueblo. La reforma del día de reposo había de ser llevada adelante. Debe ser reparada la brecha en la ley de Dios”. MSV 59.

La obra del sellamiento
Es muy importante entender de que esta obra es un proceso en el cual interviene mucho nuestra consagración, el sello de Dios con el cual seremos sellados es un afianzamiento en la verdad completa, asi es como leemos en la siguiente cita:

“Tan pronto como el pueblo de Dios sea sellado en su frente - no se trata de un sello o marca que se pueda ver, sino un afianzamiento en la verdad, tanto intelectual como espiritualmente, de modo que los sellados son inconmovibles-, tan pronto como sea sellado y preparado para el zarandeo, éste vendrá. Ciertamente ya ha comenzado. Los juicios de Dios están viniendo (MS 173, 1902).” CBA vol. 4 Pag.1183

“En la reunión realizada en Dorchester, Massachusetts, en noviembre de 1848, recibí una visión referente a la proclamación del mensaje del sellamiento y al deber de los hermanos de publicar la luz que brillaba en nuestro sendero. Después de salir de la visión, le dije a mi esposo: "Tengo un mensaje para ti. Has de comenzar a imprimir un pequeño periódico y enviarlo a la gente. Será pequeño al comienzo; pero a medida que la gente lea, te enviará medios con los cuales imprimir; y será un éxito desde el mismo principio. Se me ha mostrado que desde este pequeño comienzo saldrán rayos de luz que han de circuir el globo" (Life Sketches, pág. 125. Año 1915).” Colportor Evangélico Pág.. 10



“En nuestros campamentos se ha cometido un error. El asunto del Sábado a sido tocado, pero no ha sido presentado como la gran prueba para este tiempo.” Testimonies for the church vol. 6 Pág. 60

“Vi que Jesús había cerrado la puerta del lugar santo, y nadie podía abrirla; y que había abierto la puerta que da acceso al lugar santísimo, y nadie puede cerrarla. (Apoc 3: 7, 8) 1; y que desde que Jesús abrió la puerta que da al lugar santísimo, que contiene el arca, los mandamientos han estado brillando hacia los hijos de Dios, y éstos son probados acerca de la cuestión del sábado.
Vi que la prueba actual acerca del sábado no podía producirse antes que terminase la mediación de Cristo en el lugar santo y él hubiese pasado al interior del segundo velo. Por lo tanto, los cristianos que durmieron antes que se abriese la puerta de acceso al santísimo cuando terminó el clamor de 43 medianoche, el séptimo mes, en 1844, sin haber guardado el verdadero día de reposo, descansan ahora en esperanza; porque no tuvieron la luz ni la prueba acerca del sábado que tenemos ahora desde que la puerta se abrió. Vi que Satanás estaba tentando acerca de este punto a algunos de los hijos de Dios. Debido a que tantos buenos cristianos se durmieron en los triunfos de la fe sin haber guardado el verdadero día de reposo, dudaban de que éste fuese una prueba para nosotros ahora. En este tiempo de sellamiento Satanás está valiéndose de todo artificio para desviar de la verdad presente el pensamiento del pueblo de Dios y para hacerlo vacilar. Vi una cubierta que Dios extendía sobre su pueblo para protegerlo en tiempo de aflicción; y toda alma que se hubiese decidido por la verdad y fuese de corazón puro había de ser cobijada por la cubierta del Todopoderoso.
Satanás sabía esto y obraba con gran poder para mantener vacilantes y perturbados acerca de la verdad a tantos como le fuese posible.
Satanás probaba cada una de sus artes para sujetarlos donde estaban hasta que hubiese pasado el sellamiento, hasta que la cubierta se hubiese corrido sobre el pueblo de Dios, y ellos hubiesen quedado sin refugio que los protegiera de la ira ardiente de Dios en las siete últimas plagas. Dios ha comenzado a correr esta cubierta sobre su pueblo, y ella será extendida sobre todos los que han de tener refugio en el día de la matanza.” PE 42, 43,44.

“Después que Jesús abrió la puerta del lugar santísimo, vióse la luz del sábado, y el pueblo de Dios fue probado, como antiguamente lo fueron los hijos de Israel, para ver si quería guardar la ley de Dios.”
Primeros Escritos Pág. 254

“El tiempo del sellamiento es muy corto y pronto terminará. Ahora, mientras los cuatro ángeles están reteniendo los cuatro vientos, es el momento en que debemos asegurar nuestra vocación y elección. . .” Primeros Escritos Pág. 58

“Vi que Satanás obraría mas poderosamente a como siempre lo ha hecho anteriormente. El conoce que el tiempo es corto y que el sellamiento de los santos los pondrá fuera de su alcance de su poder; el obra ahora en todas las formas que el pueda e intentara todas sus insinuaciones para mantener a los santos apartados de su vigilancia y hacerles dormir acerca de la verdad presente o dudar de ella así es como estorba a aquellos que están siendo sellados con el sello del Dios vivo.” Manuscripts Realese Vol. 8 Pág. 220.

El zarandeo

Pregunté cuál era el significado del zarandeo que yo había visto, y se me mostró que lo motivaría el testimonio directo que exige el consejo que el Testigo fiel dio a la iglesia de Laodicea. Moverá este consejo el corazón de quien lo reciba y le inducirá a exaltar el estandarte y a difundir la recta verdad. Algunos no soportarán este testimonio directo, sino que se levantarán contra él, y esto es lo que causará un zarandeo en el pueblo de Dios. Vi que el testimonio del Testigo fiel había sido escuchado tan sólo a medias. El solemne testimonio del cual depende el destino de la iglesia se tuvo en poca estima, cuando no se lo menospreció por completo. Ese testimonio ha de mover a profundo arrepentimiento. Todos los que lo reciban sinceramente lo obedecerán y quedarán purificados. PE pag. 270

Leimos de los testimonios anteriores que el consejo del testigo fiel causa el zarandeo entre el pueblo de Dios. Cuando el consejo fue presentado a la Iglesia, unos pocos lo aceptaron pero la mayoria lo rechazo. Este consejo dice:

“Yo te amonesto que de mí compres oro afinado en fuego, para que seas hecho rico, y seas vestido de vestiduras blancas, para que no se descubra la vergüenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio, para que veas.” Apocalipsis 3:18

¿Que significan estas tres cosas?
“Vez tras vez, la voz del cielo se ha dirigido a vosotros. ¿La obedeceréis? ¿Escucharéis el consejo del Testigo fiel, en cuanto a buscar oro afinado con fuego, vestiduras blancas y colirio? El oro es la fe y el amor, la vestidura blanca es la justicia de Cristo, el colirio es aquel discernimiento espiritual que os habilitará para ver las trampas de Satanás y rehuirlas, para discernir el pecado aborrecerlo, para ver la verdad y obedecerla.” Testimonio Selectos tomo 4 pag. 46

“Entre nosotros están aquellos que, como Acán, harán confesiones demasiado tardías como para salvarse... No están en armonía con lo correcto. Desprecian el testimonio directo que llega al corazón y se regocijadan de ver silenciado a cualquiera que dirige un reproche.”-3T 272 (1873).

“El Señor quiere que se repita la proclamación del testimonio directo dado en los años pasados. Desea una renovación espiritual. Las energías espirituales de su pueblo han permanecido adormecidas por mucho tiempo; pero deben resucitar de esa muerte aparente. Por la oración y la confesión de nuestros pecados, debemos preparar el camino del Rey.”-3JT 275 (1904).

También las herejías son usadas para separar y purificar al pueblo de Dios:
“Se me ha mostrado que muchos de los que profesan conocer la verdad presente no saben lo que creen. No comprenden las evidencias de su fe. No tienen justo aprecio de la obra para el tiempo actual. Cuando venga el tiempo de prueba, habrá hombres que, si bien están predicando ahora a otros, al examinar sus creencias hallarán que hay muchas cosas de las cuales no pueden dar una razón satisfactoria. Hasta que no sean así probados, no conocerán su gran ignorancia. Y en la iglesia son muchos los que se figuran comprender lo que creen, y no se percatarán de su propia debilidad mientras no se levante una controversia. Cuando estén separados de los que sostienen la misma fe, y estén obligados a destacarse solos para explicar su creencia, se sorprenderán al ver cuán confusas son sus ideas de lo que habían aceptado como verdad. Lo cierto es que ha habido entre nosotros un apartamiento del Dios vivo, una desviación hacia los hombres, y se pone la sabiduría humana en lugar de la divina.
Dios despertará a sus hijos; si otros medios fracasan, se levantarán herejías entre ellos, que los zarandearán, separando el tamo del trigo. El Señor invita a todos los que creen su Palabra a que despierten. Ha llegado una luz preciosa, apropiada para este tiempo. Es la verdad bíblica, que muestra los peligros que están por sobrecogernos. Esta luz debe inducirnos a un estudio diligente de las Escrituras, y a un examen muy crítico de las creencias que sostenemos. Dios quiere que se examinen cabal y perseverantemente, con oración y ayuno, 313 las opiniones y los fundamentos de la verdad. Los creyentes no han de confiar en suposiciones e ideas mal definidas de lo que constituye la verdad. Su fe debe estar firmemente basada en la Palabra de Dios, de manera que cuando llegue el tiempo de prueba, y sean llevados ante concilios para responder por su fe, puedan dar razón de la esperanza que hay en ellos, con mansedumbre y temor.” JT t2 312,313

¿Cual será la prueba mas grande que como adventistas deberemos pasar?
“El último engaño de Satanás
Satanás está... constantemente haciendo fuerza por introducir lo espurio a fin de apartar de la verdad. Precisamente, el último engaño de Satanás se hará para que no tenga efecto el testimonio del Espíritu de Dios. "Sin profecía el pueblo será disipado" (Prov. 29: 18, versión Valera antigua). Satanás trabajará hábilmente en diferentes formas y mediante diferentes instrumentos para perturbar la 55 confianza del pueblo remanente de Dios en el testimonio verdadero (Carta 12, 1890).
Se encenderá un odio satánico contra los testimonios. La obra de Satanás será perturbar la fe de las iglesias en ellos por esta razón: Satanás no puede disponer de una senda tan clara para introducir sus engaños y atar a las almas con sus errores si se obedecen las amonestaciones y reproches del Espíritu de Dios (Carta 40, 1890).” Mensaje selectos tomo 1 pag 55,56





Se desenvuelven dos grupos de Adventistas
“He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oyere mi voz y abriere la puerta, entraré a él, y cenaré con él y él conmigo." (Apoc. 3: 20.) Vi que muchos tienen tanta escoria acumulada ante la puerta del corazón que no pueden abrirla. Algunos tienen que eliminar las dificultades que tienen con sus hermanos. Otros tienen que eliminar el mal genio o la codicia antes que puedan abrir la puerta. Otros colocan al mundo delante de la puerta de su corazón, y así la cierran. Toda esta escoria tiene que ser quitada. Entonces podrán abrir la puerta y dar la bienvenida al Salvador.
En la visión me fue mostrado cuán preciosa es la promesa: "Entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo." ¡Oh, qué admirable es el amor de Dios! A pesar de toda nuestra tibieza y nuestros pecados nos dice: "Tornaos a mi y yo me tornaré a vosotros, y sanaré todas vuestras rebeliones." El ángel lo repitió unas cuantas veces: "Tornaos a mi y yo me tornaré a vosotros, y sanaré todas vuestras rebeliones."
Vi que algunos volverán gozosamente. En cambio otros no permitirán que este mensaje dado a la iglesia de Laodicea ejerza influencia sobre ellos. Seguirán actuando más o menos como antes, y la boca del Señor los vomitará. Únicamente aquellos que se arrepientan celosamente recibirán el favor de Dios. 1 JT 43

“Gracias a Dios que no todos seran arrullados para dormir en el lecho de la seguridad carnal. Habra fieles que han de dicernir las señales de los tiempos al paso que un grande numero de los que profesan la verdad presente negaran su fe por sus obras, algunos habra que han de perseverar hasta el fin.” 5 T 10

“Me fue presentada una compañía que, a pesar de llevar el nombre de adventistas del séptimo día, aconsejaban que el estandarte que nos hace un pueblo singular no se destacase tanto, pues alegaban que no era el mejor proceder para dar éxito a nuestras instituciones. Pero éste no es el momento de arriar nuestra bandera o avergonzarnos de nuestra fe. El estandarte distintivo, descrito con las palabras, "aquí está la paciencia de los santos; aquí están los que guardan los mandamientos de Dios, y la fe de Jesús,"(Apoc. 14: 12) debe flamear sobre el mundo hasta el fin del tiempo de gracia. Al paso que han de aumentarse los esfuerzos para avanzar en diversas localidades, no debe encubriese en modo alguno nuestra fe con el fin de obtener patrocinio.” JT 2 pag 422

“Vi que una compañía se mantenía de pie bien guardada y firme, negando su apoyo a aquellos que querían trastornar la fe establecida del cuerpo. Dios miraba con aprobación a esa compañía. Me fueron mostrados tres escalones: los mensajes del primer ángel, del segundo y del tercero. Dijo mi ángel acompañantes. "¡Ay de aquel que mueva un bloque o clavija de estos mensajes! La verdadera comprensión de esos mensajes es de importancia vital. El destino de las almas depende de la manera en que son recibidos." PE 258

EL RITO DEL BAUTISMO




LA ADMINISTRACIÓN DEL RITO
Antes de efectuarse el rito, el oficiante de la ceremonia bautismal debe dar algunas instrucciones claras y simples a los candidatos en relación a los procedimientos en la ceremonia bautismal. Deben ser instruidos a respirar profundamente, a cerrar los ojos y la boca en el momento de ser sumergidos en el agua. Además se les debe indicar que deben mantener el cuerpo firme, parados con el pié derecho adelante y el izquierdo un poco atrás para facilitar su inmersión. Se debe recodar a los candidatos que ellos deben doblar suavemente las rodillas solamente y no el cuerpo. Hay que tener un cuidado especial con aquellos que no están acostumbrados o temen al agua, para que no queden nerviosos sin motivo. En todo caso hay que dejarlos para el último si es que hubiera más de un candidato. [1]



Al iniciarse la ceremonia bautismal, los presentes deben estar reunidos junto a los candidatos y los niños deben permanecer quietos y reverentes. El pastor oficiante invitará a cantar un himno y enseguida presentará una pequeña alocución basada en San Mateo 28: 18 – 20, esto no debe ultrapasar los diez minutos. En esta parte puede incluirse las siguientes palabras: “los hermanos están para ser sepultados en la tumba líquida, sepultados para este mundo, y resucitados para una nueva en Cristo Jesús”. Acto seguido, el ministro oficiante dobla las rodillas juntamente con los candidatos y eleva una oración a Dios mientras los demás asistentes permanecen de pié con sus cabezas inclinadas en actitud de reverencia. Luego de la oración, el ministro entra al agua para realizar el rito bautismal, entre tanto un líder de la iglesia dirige a la congregación la entonación de himnos apropiados a la ocasión. En cuanto el oficiante está ubicado en lugar y posición adecuada, él toma las manos del candidato llevándolas junto al pecho con la mano izquierda y su mano derecha levantada sobre la cabeza del candidato, pronuncia las siguientes palabras: Apreciado hermano (na), de acuerdo con tu profesión de fe en nuestro Señor Jesucristo y de haberlo aceptado como tu salvador personal, yo te bautizo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo; entonces sumerge al candidato suavemente hacia su lado derecho (en contra de la corriente cuando es en río) y cuando el candidato es levantado a la debida posición, la congregación reinicia la entonación del himno.



Después que los candidatos han sido bautizados, el ministro sale del agua y cambia sus ropas bautismales en lugar apropiado, lo mismo hacen los hermanos bautizados, entre tanto la congregación sigue entonando himnos. Una vez que el ministro y los bautizados se han mudado sus ropas, retornan al lugar donde se inició la ceremonia, el oficiante leerá algunos textos bíblicos tales como: San Mateo 3: 16, 17; Hechos 8: 39, etc. Debe ser mencionado que Dios endosa la realización de la ceremonia ahora como él lo hizo en ocasión del bautismo de Jesús, cuando El envió al Espíritu Santo a posarse sobre El. El ministro eleva una oración final e invita a los presentes a saludar a los nuevos miembros de iglesia. [2]



“El que administra el rito del bautismo debe tratar de que esta ocasión ejerza una influencia solemne y sagrada sobre todos los espectadores. Cada rito de la iglesia debe ser dirigido de manera que su influencia sea elevadora. Nada debe hacerse en forma común o despreciable, ni ponerse al nivel de las cosas comunes. Es necesario enseñar a nuestras iglesias a tener mayor respeto y reverencia por el sagrado servicio de Dios. Mientras los predicadores dirigen los servicios relacionados con el culto de Dios, están educando y preparando a la gente. Los pequeños actos que educan, preparan y disciplinan el alma para la eternidad son de vastas consecuencias para elevar y santificar a la iglesia



“Cuando quiera que sea posible, adminístrese el bautismo en un lago claro o un arroyo de agua corriente. Y désele a la ocasión toda la importancia y solemnidad que se le pueda impartir. Los ángeles de Dios están siempre presentes en un servicio tal” [3]



EL BAUTISMO, UN JURAMENTO DE LEALTAD AL SEÑOR
“Cuando los cristianos se someten al solemne rito del bautismo, el Señor registra el voto que hacen de serle fieles. Este voto es su juramento de lealtad. Son bautizados en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Así están unidos con los tres grandes poderes del cielo. Se comprometen a renunciar al mundo para observar las leyes del reino de Dios. Por lo tanto, han de andar en novedad de vida. No han de seguir más las tradiciones de los hombres. No han de seguir por más tiempo métodos deshonestos. Han de obedecer los estatutos del reino del cielo. Han de buscar el honor de Dios. Si son fieles a su voto, serán provistos de gracia y poder que los habilitará para cumplir con toda justicia. “A todos los que le recibieron, dióles potestad de ser hechos hijos de Dios, a los que creen en su nombre” [4]




VIDA Y CONDUCTA DESPUES DEL BAUTISMO
“Los votos que asumimos con el bautismo abarcan mucho. En el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, somos sepultados como en la muerte de Cristo, y levantados a semejanza de su resurrección, y hemos de vivir una vida nueva. Nuestra vida debe quedar ligada con la vida de Cristo. Desde entonces en adelante el creyente debe tener presente que está dedicado a Dios, a Cristo y al Espíritu Santo. Debe subordinar a esta nueva relación todas las consideraciones mundanales. Ha declarado públicamente que ya no vive en orgullo y complacencia propia. Ya no ha de vivir en forma descuidada e indiferente. Ha hecho un pacto con Dios. Ha muerto al mundo y debe vivir para Dios y dedicarle toda la capacidad que le confió, sin perder jamás de vista el hecho de que lleva la firma de Dios; es un súbdito del reino de Cristo, participante de la naturaleza divina. Debe entregar a Dios todo lo que es y todo lo que tiene, empleando sus dones para gloria de su nombre.



Las obligaciones del pacto espiritual que se expresa en el bautismo son mutuas. Mientras los seres humanos desempeñen su parte con obediencia ferviente, tendrán derecho a orar: “Sea hoy manifiesto que tú eres Dios en Israel.” (1 Rey. 18: 36.) El hecho de que habéis sido bautizados en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, es una garantía de que si pedís su ayuda, estas potestades os ayudarán en toda emergencia. El Señor oirá y contestará las oraciones de los que le siguen sinceramente, y llevan el yugo de Cristo y en su escuela aprenden a ser mansos y humildes.



Si habéis pues resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra. Porque muertos sois, vuestra vida está escondida con Cristo en Dios.” (Col. 3: 13.)



Vestíos pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrarías de misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de tolerancia; sufriéndoos los unos a los otros, y perdonándoos los unos a los otros si alguno tuviere queja del otro: de la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros. Y sobre todas estas cosas vestíos de caridad, la cual es el vínculo de la perfección. Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la cual asimismo sois llamados en un cuerpo; y sed agradecidos. . . . Y todo lo que hacéis, sea de palabra, o de hecho, hacedlo todo en el nombre de Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por él.” (Vers. 12-17.). [5]
PELIGRO DE BAUTIZAR A PERSONAS NO CONVERTIDAS



“La llegada de miembros que no han sido renovados en su corazón y reformados en su vida, es una fuente de debilidad para la iglesia. Este hecho se ignora a menudo. Algunos pastores e iglesias están tan deseosos de obtener un aumento del número que no presentan un testimonio fiel contra los hábitos y prácticas no cristianos. A los que aceptan la verdad no se les enseña que no pueden ser mundanos en su conducta mientras son cristianos de nombre, y estar seguros. Hasta aquí han sido súbditos de Satanás. De aquí en adelante han de ser súbditos de Cristo. La vida debe dar testimonio de que han cambiado de guía” [6]
NUESTRO BLANCO: BAUTIZAR A PERSONAS REALMENTE CONVERTIDAS
“Los pastores que trabajan en los pueblos y en las ciudades para presentar la verdad, no deben sentirse contentos, ni deben pensar que su obra está terminada, hasta que los que han aceptado la teoría de la verdad perciban verdaderamente el efecto de su poder santificador y estén en realidad convertidos a Dios. Al Señor le agradaría más tener seis personas verdaderamente convertidas a la verdad como resultado de sus labores, que tener sesenta que hacen una profesión nominal y que sin embargo, no están cabalmente convertidas. Estos ministros deberían dedicar menos tiempo a la predicación de sermones y deberían reservar una parte de sus energías para visitar a las personas interesadas y orar con ellas, instruyéndolas en la piedad “a fin de presentar perfecto en Cristo Jesús a todo hombre (Col. 1: 28)” [7]



RECEPCIÓN DE MIEMBROS
“La ceremonia de recepción de miembros debe ser iniciada con un himno apropiado para la ocasión y la lectura de un texto bíblico sin comentario. Sugerimos los siguientes textos: San Lucas 15: 7, 10; San Juan 6: 37, 39; etc. Acto seguido todos son invitados a arrodillarse, en cuanto es elevada una oración, al término de la cual no se entonará un segundo himno.



El ministro oficiante debe mencionar la alegría y contentamiento que existe entre los miembros de la iglesia como entre los ángeles celestiales, por el acto de las almas que hicieron su decisión por la verdad. El reino de Satanás, por otro lado quedó airado por perder aquellas. Es bueno también recordar que después del bautismo de Jesús El fue tentado, y las nuevas almas deben también aguardar que el mismo esfuerzo de Satanás será empleado contra ellos. En adelante, como súbditos del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, estarán protegidos en cuanto permanezcan fieles a su voto y buscaren la guía divina. El ministro debe animarles a mirar constantemente a Jesús y a confiar en El como el único salvador. Debe leer algunos versos de la Biblia como advertencia y consuelo. Sugerimos leer los siguientes textos: San Mateo: 4: 3; Colosenses 3: 1 – 4; 1ª Pedro 2: 2 – 4, 9, 10; Efectos 2: 12 – 22; 4: 22 – 321; Colosenses 2: 6, 7, 10 – 13;San Mateo 24: 13; Apocalipsis 2: 10; San Lucas 10: 20; Romanos 6: 3 – 7; 8: 1, 14 – 18; Gálatas 3: 27 – 29 y Filipenses 4: 4 – 8.



Los nuevos miembros y la congregación se ponen de pié encuato el ministro extiende la mano derecha a los nuevos bautizados, él asegura la mano derecha del miembro y dice: Apreciado hermano (a), extiendo la mano derecha de la comunión de la iglesia y te doy la bienvenida al ceno de la Iglesia Adventista del Sétimo Día Movimiento de Reforma. Hoy por la gracia de Dios eres miembro de la familia de Dios en el cielo y en la tierra, cita Efesios 2: 19 y confirma la bienvenida con un ósculo santo a los hermanos y a las hermanas con un suave apretón de mano.



Es importante, que a los nuevos miembros, se les ofrezca la oportunidad para expresar su agradecimiento y gratitud a Dios. En esta ocasión se debe aprovechar para hacer un apelo a los simpatizantes y visitas a que también se decidan a hacer el pacto con Dios. Los que decidan dar ese paso importante, deben ser invitados a pasar adelante y un hermano anciano de respeto o un pastor debe ser invitado al frente para orar con los interesados que han decidido prepararse para ser bautizados en el futuro cercano. El secretario de iglesia debe anotar los nombres de los nuevos candidatos al bautismo y la Comisión de la Iglesia deberá encargarse de planificar el programa de clases bautismales.



[1] (ver Guía Ministerial de la Conferencia General de los Adventistas del Séptimo Día Movimiento de Reforma, pág. 29).
[2] (ver Guía Ministerial de la Conferencia General de los Adventistas del Séptimo Día Movimiento de Reforma, págs. 30, 31).
[3] (2JT. 395).
[4] (Carta 129, 1903 – Ev. 226, 227).
[5] (2 JT. 397, 398).
[6] (Ev. 235).
[7] (Testimonies, tomo 4, pág. 317. Año 1879 – Ev. 235).

INTRODUCCION DEL MANUAL











Debido a la gran necesidad de contar con un sistema uniforme de administración y teniendo como objetivo principal, que en la iglesia todos podamos actuar en armonía, se ha visto necesario preparar este manual de organización eclesiástica, que nos permita manejar adecuadamente la administración de la iglesia, sin que ello se convierta en una regla que se sobreponga a las ordenanzas divinas , sino más bien, que estén en armonía con los principios del gobierno de Dios y que a su vez exalten sus sagradas ordenanzas.
Este manual, ayudará a nuestros ministros, pastores, obreros bíblicos y oficiales de iglesia en general, a organizar y administrar en forma más eficiente la obra del Señor. Además, permitirá que nuestra Institución, como organismo social, tenga un criterio uniforme de administración como dice el apóstol Pablo: “que todos hablemos una misma cosa, y que no haya división entre vosotros, sino que estéis perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo parecer” 1Cor. 1:10

Es esencial, y a la vez importante, que la iglesia como organismo social, conozca y al mismo tiempo comprenda que ninguna entidad sea de cualquier índole que sea, pueda subsistir en el transcurso del tiempo, sin que sus dirigentes sean personas que conozcan los lineamientos y principios de la ciencia de la administración, o que por lo menos tengan nociones generales de ello, para que puedan asumir responsabilidades de dirección dentro de una organización.
Hemos de comprender que el ministerio de la iglesia (ministros, pastores, diáconos, obreros bíblicos) ellos están en primer lugar como “servidores de Cristo, y administradores de los misterios de Dios… y se requiere de los administradores [de ellos], que cada uno sea hallado fiel” (1ª Corintios 4:1,2). ¿Qué nos sugieren estos pasajes de la Palabra de Dios? Por lo que podemos entender, es que, todos los que han sido llamados para conducir la iglesia, ellos son sencillamente servidores administrativos de la iglesia. Pero ¿que entendemos cuando el Señor nos dice que los que dirigen la iglesia son servidores y administradores? Simple y llanamente, lo que el Señor nos está queriendo decir, que todo dirigente que ha sido elegido para una u otra responsabilidad en la iglesia el o ellos tienen que ser personas que tienen que ver con todo el proceso administrativo de planificación, organización, ejecución y evaluación de los diferentes programas que se puedan poner en marcha en pro del desarrollo de la iglesia. Es eso, lo que el Señor nos está señalando en su Palabra.

Una vez que hemos comprendido lo que el Señor nos quiere enseñarnos en los pasajes arriba citados, es importante que entendamos, que la administración eclesiástica por su naturaleza, se divide en dos partes generales a saber: Administración Espiritual y La administración material. La primera (administración espiritual) abarca la predicación del Evangelio de nuestro Señor Jesucristo en sus distintas formas (cultos públicos y en la iglesia), la administración de los ritos y ceremonias de la iglesia, (bautismo, Cena del Señor, matrimonios, preparación de los candidatos para el bautismo, ordenación de personas para el ministerio, sesiones de miembros, etc.). Todos estos aspectos están relacionados con los procesos administrativos de la iglesia. Y es importante, que este primer aspecto sea comprendido claramente por la iglesia, debido a que muchos o la mayoría de los miembros de nuestra institución creen que los dirigentes de la obra no tienen que realizar actos administrativos; sin entender, que para toda actividad se necesita hacer uso de la administración. En segundo lugar (administración materia), la administración eclesiástica tiene que ver con la administración de los recursos financieros (dinero) y demás bienes materiales (muebles inmuebles, etc.) de la iglesia, los que son administrados por tesoreros y por comisiones financieras. Entendiéndose que los tesoreros son los encargados de administrar los dineros de la iglesia, y las comisiones financieras a su vez, se encargan de de preparar los presupuestos anuales y la planificación de los usos que se les pueden dar a los otros recursos de la obra. También las comisiones financieras son las encargadas de planificar la compra o la venta de bienes necesarios o innecesarios para la obra. Tanto los tesoreros, como las comisiones que se han mencionado, no son autónomos en sus funciones, y solo pueden actuar en base a resoluciones de las juntas directivas y asambleas de iglesia.

Además, queremos señalar que los principios elementales de la administración, su aplicación al desarrollo de la iglesia, tiene como objetivo principal, que tanto el ministerio de la iglesia, como los miembros de nuestra institución tengamos un criterio uniforme en todos los aspectos administrativos de la obra, sin perder de vista que las reglas y normas administrativas no se sobrepongan a los preceptos divinos, sino más bien que ellos sean un medio para ensalzar las normas del Señor, y que tanto lo uno como lo otro se armonicen en el gran plan de redimir al hombre de la maldición del pecado.

El Señor en su divina providencia, quiere que comprendamos que el orden es la ley del cielo, y que su iglesia aquí en la tierra debe caracterizarse también por el orden, el sistema y la armonía en todas sus partes y dependencias que la conforman. La Palabra de Dios no dice al respecto: “Pero Dios, no es un Dios de confusión, sino de paz como en todas las iglesias de los santos. ...Empero hágase todo decentemente y en orden” (1Cor. 14:33,40). Dios es un Dios de orden. Todo lo que se relaciona con el cielo.... para que pueda poner sobre ella el sello de su aprobación” Servicio Cristiano, pág. 93.

El estudio del presente manual está dividido en dos secciones generales: sección uno, la administración académica y su aplicación en la administración de la iglesia y sección dos, la organización como principio de la administración y su aplicación eclesiástica. Las dos secciones, a su vez están divididas en veintidós partes generales con sus sudiviciones naturales de cada parte.
Que el Dios del cielo, el Señor Jesucristo y el Espíritu Santo, nos ayuden hoy más que nunca, a ser una iglesia ordenada y disciplinada, de tal suerte que el sello de la aprobación Divina, pueda ser colocado en toda labor que la iglesia emprenda en beneficio del engrandecimiento y progreso de la obra. AMEN.


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